La piel

El paisaje del cuerpo humano, diverso, desnudo, adornado, en movimiento, en reposo o expectante, cataloga una antropología de sentimientos que atraviesan el tiempo y el espacio. Cuando el ser humano se despoja de ropajes que le sitúan en una época y en un contexto social determinado, se revela su sentido universal. Desde la desnudez expresiva de formas estilizadas de bailarines clásicos o rituales, hasta la imprimación tribal pletórica de significados se identifica un lenguaje que, sin contener palabras, se vuelve inteligible.

The landscape of the human body, diverse, naked, adorned, in movement, at rest or expectant, catalogues an anthropology of feelings that crosses time and space. When the human being strips himself of the clothing that situates him in a particular time and social context, his universal meaning is revealed. From the expressive nudity of the stylised forms of classical or ritual dancers, to the tribal priming full of meaning, a language is identified which, without containing words, becomes intelligible.

La tierra

Isabel Muñoz nos desvela, en las construcciones simbólicas más antiguas de la Humanidad conocidas hasta ahora, la telúrica arqueología de los sentimientos. Lugares que fueron habitados hace más de once mil años han sacado a la luz, tras recientes excavaciones, arcaicas estructuras de formas circulares con ornamentaciones de tipo animal, abstracto e incluso antropomorfo. En esta tierra remota parece habitar todavía el pensamiento mágico de los enigmas de nuestra especie. Isabel Muñoz nos traduce en imágenes cargadas de sensualidad el significado, todavía desconocido, de aquellos rituales misteriosos. Estas obras, realizadas durante la noche bajo la luz del firmamento y la ayuda de antorchas eléctricas, exteriorizan grafismos y texturas que son imposibles de detectar bajo la luz del Sol. El resultado es inquietante, hermoso, casi espectral.

Isabel Muñoz reveals the telluric archaeology of feelings in the oldest known symbolic sites of humanity. Places that were inhabited more than eleven thousand years ago have brought to light, after recent excavations, archaic structures of circular shapes with animal, abstract and even anthropomorphic ornamentation. In this remote land still seems to inhabit the magical thought of the enigmas of our species. Isabel Muñoz translates the still unknown meaning of those mysterious rituals into images charged with sensuality. These works, created at night under the light of the firmament and with the help of electric torches, externalise graphics and textures that are impossible to detect under the light of the sun. The result is disturbing, beautiful, almost spectral.

«La piel y la tierra son una constante en mi trabajo y creo que es una constante también en nuestras vidas de seres humanos.»